Siempre lo negó, aunque los números reflejaran inequívocamente la parálisis en los Servicios de Salud de Zacatecas. En los meses de octubre y noviembre, Uswaldo Pinedo Barrios arrastraba un déficit de gasto superior al esperado. Para entonces los centros de salud y las jurisdicciones sanitarias laboraban con los insumos mínimos, o en algunos casos sin insumos.

El Colegio de Médicos de Zacatecas y la Delegación 39 del Sindicato Nacional de Salud trataron de advertirle a David Monreal Ávila de la crisis de abasto de medicamentos que poco a poco se gestaba en la Secretaría de Salud. Ni Pinedo Barrios ni su jefe superior hicieron caso. Las compras consolidadas nunca llegaron y la carencia de insumos explotó.

Meses después, ya con un presupuesto a modo de la nueva gobernanza, David Monreal restringió a los 58 presidentes municipales, durante la toma de protesta a la Red Zacatecana de Municipios por la Salud, a trabajar en esquemas “peso a peso” u otro tipo de acuerdos y convenios que coadyuvaran en los gastos de las clínicas rurales y las casas de salud.

Al evento asistió su hermana, Ana María Monreal Ávila, en calidad de Directora de Salud Pública de la SSZ. A ella, David le encargó “dar seguimiento” a las carencias de los municipios que conformaron ese día la Red Estatal por la Salud. Su labor consistía más bien en coordinar y generar consensos de voluntad política. O sea, convencer a los municipios de “asociar recursos” con el gobierno estatal.

Corría el séptimo mes de estrenada la nueva gobernanza, y David se dio tiempo frente a los ediles para martirizarse como lo hace cotidianamente. De nueva cuenta tuvieron que escuchar el clásico sermón en el que él recibió una administración con graves fallas financieras, que la pandemia por Covid-19 expuso aún más las debilidades del sistema sanitario, etcétera, etcétera, etcétera.

De toda esa retórica de sufrimiento y sacrificio una sola de sus observaciones mostró lógica, veracidad y sustento documental: “para empezar el medicamento es una demanda muy sentida, luego el tema de infraestructura pues tenemos municipios que apenas si les alcanza una clínica rural”. Lo que no sabía es que su gobierno era responsable de la misma queja que clamaba.

Y si lo sabía, de nueva cuenta disimuló su responsabilidad y la de su secretario en el desabasto de medicamentos dentro de los centros de salubridad estatales. Poco podrá decir ahora la bancada oficialista en la LXIV Legislatura, la Cuenta Pública 2021 es el documento que tumba por los suelos la demagogia tóxica y pueril de este al que le dicen “gobierno”.

Las cifras que el Colegio de Médicos y el Sindicato Nacional de Salud comentaron a este columnista entre octubre y noviembre del 2021, rondaban los 400 o 450 millones de pesos de subejercicios debido a que Uswaldo Pinedo no tenía la menor idea de cómo realizar compras consolidadas. Sus números no estaban errados, pues el subejercicio hoy asciende a casi 435 millones de pesos.

La negligencia más preocupante la concentra el concepto de gasto Productos Químicos, Farmacéuticos y de Laboratorio que en total suma subejercicios por 321 millones 875 mil 534 pesos. En lo que toca al Equipo Instrumental Médico y de Laboratorio, Pinedo Barrios informa haber dejado sin gasto 9 millones 874 mil 387 pesos.

Sí, esa carencia de medicamentos a la que David calificó como una demanda “muy sentida”, proviene nada más y nada menos que de su nueva gobernanza. Luego también está la infraestructura de la que se queja porque en algunos municipios ni siquiera existen clínicas rurales o se encuentran en deterioro, y en las que funcionan no hay enfermeras, según él.

Pues bien, los Servicios de Salud de Zacatecas dejaron de gastar 50 millones 67 mil 121 pesos en Servicios de Instalación, Reparación, Mantenimiento y Conservación. Lo mismo que restringieron 2 millones 911 mil 223 pesos de Remuneraciones al Personal de Carácter Transitorio, y otros 11 millones 210 mil 906 pesos de Remuneraciones Adicionales y Especiales.

O qué tal los 22 millones 969 mil 46 pesos que dejaron de pagar en Servicios Profesionales, Científicos, Técnicos y Otros Servicios, ¿esas son las fallas financieras que recibió de la pasada administración? No, esas son las fallas financieras que corresponden a un vacío administrativo que llegó a Zacatecas el pasado 12 de septiembre.

Si lo dividimos por jurisdicciones sanitarias, los subejercicios que mayor impacto tuvieron se registran en Fresnillo con 4 millones 335 mil pesos y Zacatecas con 2 millones 219 mil 556 pesos. En cuanto a hospitales, el de la Mujer Zacatecana reconoce subejercicios por 4 millones 665 mil 167 pesos. Y el ganador: Oficinas Centrales, con 422 millones 957 mil 193 pesos.

Una hipótesis de trabajo, aunque escalofriante, no debe descartarse aquí: ¿los subejercicios obedecen a que David Monreal sólo quiere aportar recursos si los municipios entran en un esquema de 50-50 para obtener gasto público? ¿Cómo impactarán en el presupuesto de egresos de la federación 2023 estos huecos presupuestales en Zacatecas? Es un verdadero desastre.


#Casualidades: Es tiempo de presumir, a como dé lugar, porque las posiciones en el gabinete que solicitó Norma Julieta del Río Venegas a David Monreal son pocas y tambalean fácilmente. Como siempre, su estrategia mediática y administrativa es absolutamente predecible.

No es casualidad pues, que Silvia Saavedra Juárez se estrene en el espacio de “opinión” del diario Imagen de Zacatecas, y que Humbelina Elizabeth López Loera aparezca constantemente en los medios “aliados” a los que les han otorgado los convenios más jugosos. Lo mismo que otros tantos secretarios(as) y subsecretarios(as) ahora convertidos en opinadores(as).

Tampoco es ningún secreto, confirmado dentro y fuera de la nueva gobernanza, que la comisionada del INAI se encargó de cabildear con algunos “medios” amigos para que “apoyen” a David. Incluso se acercó con otros un tanto “incómodos” a los que quiso tratar como subordinados, desconociendo su alcance con personas de criterio propio.

En casos específicos incluso con la consigna de “chingar” a Verónica del Carmen Díaz Robles a cambio de algunos pagos en efectivos. Es una vieja lucha que emprenden Julieta y Gerardo Flores López para monopolizar las líneas editoriales con objetivos puntuales como es notorio.

El problema es precisamente la predictibilidad de este tironeo. ¿Cómo hablar de la ética de los funcionarios como rama del “combate a la corrupción”, si desde el pasado 2 de abril se publicó en el Periódico Oficial el Código de Ética y apenas este miércoles tomaron protesta a sus Comités?

Empero, a Humbelina se le abrieron todas las líneas oficialistas para “presumir” que este miércoles tomaron protesta los Comités de Ética de la nueva gobernanza que acumula 249 días de agravios y ofensas contra la burocracia estatal. Parece que nadie les ha avisado que hace tiempo perdieron toda credibilidad.

Y ni qué decir de cómo presume a Julieta como su palanca de influencia y carta de presentación, abiertamente y en cualquier lugar, el subsecretario de Control de la SFP, Víctor Hugo Hernández Reyes. Toda la “escuelita” de la comisionada en sus pupilos.

Twitter: @GabrielConV

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