En medio de la crisis sanitaria que llegó al país hace tres semanas, no fue sino hasta el martes 31 de marzo cuando la Secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, abrió un canal de comunicación con los Gobernadores y la Jefa de Gobierno.

La videollamada de la secretaria además de llegar con bastantes días de retraso, también arrojó resultados, digamos… intrascendentes.

Más allá de atender los puntos de vista y solicitudes específicas de los mandos estatales, la Secretaria de Gobernación les dictó una especie de “manifiesto” que han denominado “Acuerdo de Gobernabilidad y Unidad Nacional en la lucha contra el COVID-19”. Cierto que, ni el nombre ayuda ni el contenido es relevante.

Este curioso documento señala, en su apartado primero, que la Secretaría de Gobernación será el vínculo institucional entre los tres órdenes de gobierno para mantener el nexo de cordialidad y coordinación institucional permanente con todo el Gobierno de México. O sea que…

Sí, o sea que, en medio de la crisis, el Gobierno de México a través de la SEGOB ofrece ¿”cordialidad y coordinación“?

Se supone que dentro de sus facultades legales, la encargada de la política interna tendría que construir utilizando esos dos puentes. Aunque, claro, donde se ejecutan las decisiones presidenciales es en las oficinas de Relaciones Exteriores, al despacho de Marcelo Ebrard.

El resto del documento es una simple transcripción de los acuerdos que ha emitido el Consejo de Salubridad General y la Secretaría de Salud en cuanto a medidas extraordinarias, mismas que adoptaron los gobernadores desde semanas antes.

Más allá de brindar respuestas, el Gobierno Federal sólo pasó copia del Diario Oficial de la Federación de ese día.

En la famosa videollamada ninguna expresión, solicitud o exhorto de los Gobernadores fue escuchado, con lo que, nuevamente, se advierte la falta de liderazgo político del “gobierno central” dentro del contexto de crisis.

Sin soluciones, sin respuestas y sin claridad en ningún tema, los Gobernadores cerraron su computadora y volvieron a sus preocupaciones actuales.

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