En un contexto de restricciones asociadas a la crisis sanitaria, sin mítines multitudinarios ni un enjambre nutrido de medios de comunicación detrás del presidente, eligiendo foros reducidos para eventos con poca gente, Andrés Manuel López Obrador incluyó a Zacatecas entre los estados donde reinicia sus giras fuera de la cuarentena.

En la última semana del mes de junio, el presidente de la república pondrá las cartas sobre la mesa al gobernador Alejandro Tello Cristerna. La información en manos de los operativos del Consejo Nacional de Morena, en contacto permanente con la presidenta Bertha Elena Luján Uranga, hablan de los primeros acercamientos rumbo al 2021.

Qué mejor espacio de diálogo que uno donde abunde la privacidad, pues los temas a tratar merecen esa discreción. La esgrima probablemente se centre en las coaliciones que pretender forjar dos fuerzas políticas para asistir a la elección. No obstante, la disciplina tricolor hasta ahora mostrada hacia el presidente pone en duda una alianza de facto con el PAN-PRD.

El discurso institucional de Tello Cristerna gravita en agradecer el apoyo de López Obrador, se trabaja de manera coordinada y hay flujo de recursos, que ha venido en escases con la pandemia. Hay entendimiento y cordialidad con el gobierno federal, lo mismo que los otros 10 gobernadores y una gobernadora del PRI.

Las condiciones financieras de Zacatecas además impiden elegir el camino de la rebelión opositora cuando el 95% del presupuesto local depende de las participaciones federales. Evidentemente los gestos institucionales y de conciliación permiten mantener a flote la administración, pero será en el proceso electoral donde broten naturalmente las diferencias.

Ya lo dijo Andrés Manuel en la última de sus visitas por el estado: coordinación y reconocimiento entre autoridades en tiempos de gobierno. Diferencias, gritos y abucheos en tiempos de lucha electoral, mismos que están a la vuelta de la esquina. En el inter, la gira de los acuerdos.

Tiempos de definiciones y acuerdos.

El presidente llegará a Zacatecas con una coalición temprana a sus espaldas, para repartir espacios de representación popular entre Morena, PT y Verde Ecologista. Éste último es el que más costos traerá a la credibilidad a la baja de López Obrador y su partido, pero están dispuestos a ceder para mantener la mayoría en la Cámara Baja.

El partido de López Obrador no creció en preferencias, por el contrario, sus números comienzan a sentir los estragos del coronavirus. Esa es la oportunidad de las Redes Sociales Progresistas, la Fuerza Social por México (con su registro en “veremos” en el TEPJF), así como de sus aliados en el Congreso de la Unión.

De ahí que la visita presidencial venga a concluir lo que el proceso electoral 2018 dejó pendiente: presionar al PRI para entregar sus gobiernos de forma tersa y sin sobresaltos. Además, las encuestas de intención de voto, por partido, todavía muestran una diferencia importante de puntos al descontar las alianzas.

Ese es el principal interés de López Obrador, desincentivar cualquier actividad de un bloque opositor llamado BOA, o coalición PRIPANPRDMC. No importa que la pandemia apremie, lo importante es asegurar su arrastre político por los próximos tres años, antes de ceder la estafeta a quien aglutine las fuerzas políticas suficientes.

Ricardo Monreal Ávila es uno de quienes le construyen consensos, y si no fuera por él, hoy el Coordinador Nacional de Ganadería tendría pocas perspectivas de alcanzar siquiera la candidatura. Congelado en las decisiones de Palacio Nacional debido al fracaso del Crédito Ganadero a la Palabra, David Monreal Ávila es un político en activo y que ganará un espacio en la contienda gracias a su hermano mayor.

El control de las candidaturas.

Aún así se da el lujo de apretar las tuercas de los constructores, pedirles moche y condicionarles obra, pues la campaña anticipada está en números rojos ya sin el Crédito Ganadero a la mano. Claro, no sin que los inconformes aprovechen la primera oportunidad para ir a quejarse con el líder del Senado, ese que endereza las metidas de pata de David.

Alfonso Ramírez Cuellar no será una piedra en el camino de Ricardo pues le debe el cabildeo, junto con Julio Scherer Ibarra, para que el tribunal electoral federal le permitiera la presidencia interina. Además, las decisiones se sellan primero en los despachos presidenciales y luego son notificados a la dirigencia temporal de Morena.

Catalina Monreal Pérez, ya sea por encuestas o por designación directa como delegada especial, es cuestión de tiempo para que tenga en sus manos (y las de su padre) las listas de candidatos de la coalición MorenaPTPVEM en Zacatecas. Ingenuos los que creyeron que esas listas se manipularían en las oficinas de Bienestar o del IZAI.

Al bloque ideológico del partido no le queda más que la negociación en desventaja, ir a una revuelta interna “sería el suicidio”. Aunque en el monrealismo incluso ya ven pintada de verde la capital del estado. ¿Qué noticias traerá Andrés Manuel a Zacatecas? ¿Está por decidirse la elección local?


#Casualidades: No hay forma tan gentil como la de la Auditoría Superior del Estado, para decirle a la Síndico del ayuntamiento capitalino, Ruth Calderón Babún, que lo suyo es un ridículo monumental y que en política hay niveles.

Otra vez, derrotados.

El ente fiscalizador rechazó, una vez más, las quejas que Ruth interpuso en contra del edil Ulises Mejía Haro, ya que, por alguna extraña razón, en sus denuncias no incluyó ninguna evidencia de lo que acusaba.

No conforme con ello, la institución financiera BBVA se negó a congelar las cuentas del municipio porque no presentó el escrito con firma autógrafa del presidente, como lo establece la Ley Orgánica del Municipio. Y esos son los “equipazos” de David Monreal.

Twitter: @GabrielConV

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