Él mismo se ató de manos. La campaña de David Monreal Ávila, como se anticipó aquí desde hace algún tiempo, se sostiene en dos pilares. El gran problema de ambos soportes es que ninguna de las funcionarias federales puede aparecer en público como ellas quisieran y como el candidato las necesita. Desde sus oficinas mueven la agenda, sin poder salir de las cuatro paredes.

Verónica del Carmen Díaz Robles y Norma Julieta del Río Venegas terminaron por cooptar las decisiones de campaña, aunque eso -paradójicamente- no ayude a un candidato acostumbrado a que le resuelvan la vida. En ausencia obligatoria de su guardia pretoriana, de alguna forma David tendrá que buscar el tiempo para desahogar la cantidad de compromisos que llegaron con su aspiración.

Y el quiebre con personajes clave del D21 es patente. Fuentes al interior del bloque “davidista” confirmaron a este espacio que incluso a Enrique Manuel Laviada Cirerol, el candidato ya no le devuelve ni las llamadas ni los mensajes. Tampoco hay rastro ni huella alguna de la operación del senador chiapaneco Oscar Eduardo Ramírez Aguilar.

Diferencias de criterio entre el ex director de NTR Zacatecas y David Monreal habrían provocado una ruptura que suma varios días de añejamiento. Enrique Laviada vivió la misma suerte que Eldaa Catalina Monreal Pérez. Dar sus puntos de vista al aspirante les costó haber caído de su gracia, porque el candidato sólo escucha lo que él quiere escuchar y nada más.

Ahora tendrá que resolver el vacío de poder que provocaron sus dos fieles custodias, pues del otro lado el D21 se convirtió de facto en una pieza ornamental de la campaña. A tal grado escalaron las diferencias entre quien espera llegar a diputado plurinominal por Morena y su candidato, que Laviada Cirerol ha optado por dedicarse a pavimentar el camino con ruta al 2024.

El editorialista podrá portar la camisa del partido y presumirla en las calles y las redes sociales, sin embargo, sus esfuerzos están concentrados en cumplir con la encomienda que le solicitó Ricardo Monreal Ávila. La única diferencia es que, gracias a que David repite los mismos errores en que 2016, Enrique ya advirtió al senador que poco se puede hacer por la campaña de su hermano.

La respuesta del coordinador de Morena en la Cámara Alta debió ser la misma que dio a Saúl y Catalina Monreal: no desperdiciar la operación en campo que extendieron en los últimos meses, y fortalecer el proyecto desde el nuevo partido Fuerza Por México. Si el 2021 es un trago amargo (con la derrota o victoria de David), la prioridad hoy debe de ser la elección presidencial.

No por casualidad corrieron una fotografía Cuauhtémoc Calderón Galván, Enrique Laviada y Alfredo Femat Bañuelos el pasado miércoles. Hubo preocupación de los ahí reunidos porque la agenda de David parece no tener lógica de campaña, además de que el control riguroso que reparten entre Verónica y Norma Julieta es un filtro que rechaza los consensos.

Pero, no todas han sido malas noticias para Femat Bañuelos. Si antes le interesaba muy poco la candidatura de José Xerardo Ramírez Muñoz al Distrito I, el exfuncionario de la Secretaría de Finanzas le dio el mejor pretexto para detener la estructura petista en esa aspiración. Ayer mismo Xerardo abandonó la camisa color rojo en su gira, y la cambió por una playera y chaleco guindas sin logos.

Con el canje, Xerardo también confirma el pronóstico del candidato del Va Por Zacatecas en el mismo distrito, Arnoldo Rodríguez Reyes, pues previene una contienda competida. A doce días de iniciadas las campañas no modificas tu apariencia por mero gusto o capricho. Hay una estrategia de fondo, muy probablemente relacionada con los números de las encuestas.

Indirectamente, Ramírez Muñoz también pega en la campaña de Jorge Miranda Castro. Tendrán que confiar únicamente en la estructura que dicen tener en el Verde Ecologista, pues con la decisión de Xerardo el PT no sólo le puede restringir sus votos, sino que también obliga a Femat a desentenderse de los sufragios que pudiera aportarle en el municipio al ex secretario de Finanzas.

No es un buen momento para que el selecto grupo de la SEFIN juegue con esos dardos. Se acerca un interesante debate y el PES tiene la iniciativa de su lado. Todo estaría listo para que al Instituto Electoral lleguen las primeras denuncias en contra del gobierno de Alejandro Tello Cristerna por inequidad en la contienda, debido a los spots “Finanzas Sanas”.

El objetivo: los candidatos del Juntos Haremos Historia en la capital, así como el variado grupo de (supuestos) exfuncionarios estatales que hoy caminan en esas campañas. Desde su trinchera abonan a las grietas de la coalición. Por el momento, Enrique Laviada y los D21 se lavan las manos de la campaña, y las condiciones para el triunfo de Claudia Edith Anaya Mota comienzan a madurar.


#Casualidades: Solicitó licencia para abandonar sus actividades legislativas, tan sólo para regresar a su escaño una semana después. Presumió tener todo el apoyo de David Monreal Ávila, sin comprender que su candidato no puede ayudarse ni a sí mismo.

Eduardo Rodríguez Ferrer es ese diputado que retrata muy bien la mínima calidad política de la LXIII Legislatura. Logró los votos para convertirse en titular de la comisión de Presupuesto, Patrimonio y Finanzas, y echó por la borda lo mucho que había ganado en este periodo.

Su ambición: la vacante que deja Le Roy Barragán Ocampo como Secretario General del Congreso. De pésimo diagnóstico y peor operación, “Lalo” Rodríguez dejó la curul sin siquiera haber reunido los 22 votos necesarios para lograr su acometido.

Tal fue el apoyo que presumía de David, que este jueves por la tarde la bancada de Morena reventó la sesión para dejar acéfalo el lugar del secretario. Ferrer no sólo no tenía los votos de los guindas, desde un inicio José María González Nava hizo patente la negativa del bloque oficial.

Aún sin votos, Eduardo Rodríguez ya le había autorizado a Susana Rodríguez Márquez, para que firmara uno de sus desayunos a nombre de la Legislatura. La respuesta de la presidenta de la CRIyCP fue un atento agradecimiento y el disimulo del cretinismo que acababa de escuchar.

Un avezado conocedor de la Legislatura comentó en breve la desgracia de Ferrer: dejas un lugar privilegiado para buscar (sin reunir los votos suficientes) la Secretaría del Congreso, y todavía no sabes quién gana la elección de junio. Hundió su bote salvavidas con bastante antelación.

Twitter: @GabrielConV

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