Después de dar instrucciones a un grupo de servidores de la nación del municipio de Tabasco, Leobardo Campos Rincón les pide “con toda responsabilidad” borren el audio que acaban de recibir en sus celulares. Profesor de profesión, actualmente se encarga de coordinar los trabajos de la Región 03 en Jalpa, según lo informa la subdelegada Maribel Villalpando Haro.
El mensaje es prolijo en las formas y las estrategias que desarrolla la Secretaría de Bienestar para desplazar su estructura hacia los trabajos electorales. Son las indicaciones que, a su vez, los coordinadores reciben de los subdelegados, y estos, de la encargada de la oficina en Zacatecas, Verónica del Carmen Díaz Robles.
Y no sólo de la doble tarea que desempeñan como funcionarios públicos y como promotores de Morena, sino que el audio es una abierta confesión: la delegación de Bienestar es hoy la responsable “del proyecto de David y [todo] lo que viene hacia abajo”. Con ello, Campos Rincón supera aquella frase de Verónica Díaz “es inmoral, no ilegal”. Esto, por el contrario, es totalmente ilegal.
Tienen en su poder cuestionarios, padrones de beneficiarios, “claves secretas” de sus empadronados, un sistema de registro con datos personales y, de ser necesario, teléfonos y nombres distintos a los suyos. Deben presentarse ante la ciudadanía como “voluntarios de la región”, pertenecientes a Morena, y su labor es supervisar a otros compañeros.
El tamiz de los resultados de su labor vendrá después del “evento electoral”, explica Leobardo. Y habla de “remover” gente de las plazas eventuales que otorga la Secretaría de Bienestar, como condición intrínseca al triunfo de ese proyecto monrealista. Mucho más explícito a la hora de llamarlos a la reflexión del trabajo que tienen, aunque no sea mucho lo que se les paga.
A falta de estructura en Morena, los servidores de la nación son quienes deben de invitar a automovilistas para que participen en la próxima caravana de apoyo al candidato de Tabasco, el ex priista Gilberto Martínez Robles. Cada uno de ellos deberá de llevar a diez personas, las cuales deberían tener su registro al concluir este jueves para verificar que realmente aporten a la elección.
Este es el “Tabasco Más Chingón” que ofrece en campaña Martínez Robles. El del condicionamiento a los beneficiarios de programas sociales que, según Andrés Manuel López Obrador, es una práctica que había quedado en el pasado. El “PRIAN” en color guinda, con el que visten distintos candidatos apenas rebautizados en las aguas de la Cuarta Transformación.
De acuerdo con algunos candidatos de otras opciones políticas consultados por este espacio, ese es el ambiente que se vive en los 58 municipios del estado. Una campaña anticipada que lleva dos años en construcción una vez que la delegación de Bienestar y la Coordinación Nacional de Ganadería se instalaron como plataformas de promoción para David Monreal.
Lo que tenemos hoy es la culminación de esos esfuerzos desde el gobierno federal, que no piensa y no toma decisiones sin un cálculo electoral. No obstante, el audio que grabó Leobardo Campos tiene relevancia en el momento en que describe una estrategia que parece no dar los resultados esperados a 15 días de la cita en las urnas.
Si a dos semanas de la elección aún se habla de condicionamiento a los servidores de la nación, y se juega con la estabilidad laboral a cambio de su compromiso en campaña, es porque la raquítica estructura de operadores territoriales -o el “ejército democrático” como lo llamó David– no termina de encontrar un vínculo entre sus objetivos y sus metas.
No basta con 300 coordinadores territoriales, que hace algunas semanas cobraban en la delegación de Bienestar. Ni siquiera los funcionarios de Verónica Díaz están convencidos de la causa para la que trabajan, pues uno de los mayores errores durante los últimos dos años fue aterrorizar a quienes se encargarían de ayudar en la “operación” electoral.
Por eso los servidores de la nación, aunque mantengan sus credenciales, poco a poco se han ido desplazando a otras ofertas políticas. En silencio trabajan para la amplia variedad de partidos que vemos hoy en contienda: desde el PES al que se adhirió Mario Cervantes González (antes apalabrado con David), hasta Nancy Aguilera Lazalde en Sombrerete.
Semanas atrás el subdelegado de la región de Río Grande, Jaime Manuel Esquivel Hurtado difundió otro audio donde explicaba a otros servidores de la nación que los comités de promoción de David Monreal no debían ser utilizados para apoyar a la candidata de Morena en Sombrerete, Karina Pérez Flores. De lo contrario también serían dados de baja.
Existen agravios y contradicciones en la “estructura” que teóricamente llevará a la coalición Juntos Haremos Historia a su anhelado triunfo. A falta de un partido que respalde a David, el fresnillense se confía en que el condicionamiento a sus funcionarios y a los beneficiarios de programas será la palanca infalible de votos. Empero, no hay nada más incierto que esa suposición.
#Casualidades: Una denuncia más, ahora en el noticiero de Verónica Trujillo Jiménez, involucra a la misma estructura en la logística de vacunación en Zacatecas capital. La ciudadana de nombre María Magda, dio los datos específicos del condicionamiento del voto.
Reside en la colonia Cieneguillas donde no hay tendido de electrificación suficiente para iluminar su rostro mientras habla con la locutora. Su esposo acudió a vacunarse el pasado miércoles a las instalaciones del Campus UAZ Siglo XXI.
A pesar de que en su hogar viven cinco personas que cuentan con credenciales de elector, únicamente el de su esposo fue el teléfono que recibió la llamada del número 492-116-85-85. Desde esa línea lo contactaron para exigir su voto por el candidato Jorge Miranda Castro.
Cuando su esposo llegó a la sede de vacunación fue atendido por una persona que portaba chaleco color beige. Cargaba con una libreta donde anotaba los folios de inscripción y los contrastaba con los comprobantes de registro que cada persona debía portar.
Pidió sus datos personales como nombre, dirección y teléfono, y los registraba en su cuaderno. Este jueves, cerca de las 10 de la mañana su esposo escucha al dueño de la línea comprometer su voto por Morena y por el candidato capitalino, pues gracias a él recibió su vacuna.
La persona se identifica como integrante del partido guinda, y les explica que la vacunación es un compromiso adquirido, por el cual debían de entregar a cambio la garantía de su sufragio. “Es una candidatura sucia” exclamó Magda, y señaló que a su cuñada también la buscaron con el mismo objetivo.
Twitter: @GabrielConV