Hay una estrategia completamente equivocada en las oficinas (porque cuarto de guerra no son) de David Monreal Ávila. La Jornada Zacatecas es un periódico con una reputación y lectores cargados hacia la línea crítica que tenían definido su voto incluso desde antes de la campaña. En cambio, diarios como El Sol de Zacatecas e Imagen de Zacatecas, representan una vitrina mucho más amplia.

Tradicionalmente es El Sol donde los partidos han preferido reproducir golpes mediáticos en las campañas electorales. Ese rotativo se mantiene como el medio impreso con mayor tiraje y distribución en todo el estado, que permite impactar de manera más efectiva en los mensajes hacia una población distribuida de manera más uniforme en distintos estratos y regiones.

Por ejemplo, fue en ese tabloide donde se le dio portada a Víctor Carlos Armas Zagoya (ahora metido a “pastor”) en la elección del 2016 al día siguiente de presentar denuncia contra su hoy candidato preferido, por enriquecimiento ilícito y supuestos vínculos con la delincuencia organizada. La idea era que el mensaje llegara a distintos rincones del estado, cuando las redes aún no tenían esa permeabilidad.

Es probable que los lectores de La Jornada Zacatecas sean quienes más resienten el quiebre en su línea editorial, pues ha suavizado sus términos en cuanto a las investigaciones que realizaron del Crédito Ganadero a la Palabra, y la imagen que construían de David Monreal. Definitivamente no era el mejor espacio -mucho menos Ecodiario– para aventurarse hacia sus pretensiones.

Incluso las módicas encuestas de TrueData que daban muy amplia ventaja a los candidatos de Morena en la candidatura a gobernador, la capital de Zacatecas, Fresnillo, Guadalupe y Jerez (supuestamente patrocinadas por esa casa editorial), fueron colocadas de manera sistemática en las portadas del diario, con lo que condensaban el viraje en los temas que ahí se difundían.

Los comentarios en redes sociales mostraron el descontento de sus propios consumidores, pues notaban fácilmente la nueva tendencia que se gestaba en La Jornada Zacatecas (dentro de los márgenes de libertad de prensa y libertad de empresa). Sin embargo, aún es un diario impreso pequeño a diferencia de aquellos dos y, claro, mucho más económico.

La campaña de David Monreal termina con huecos y vacíos de poder como lo fue su costumbre. La lucha intestina por darle órdenes al candidato era el sello particular, a tal grado que todavía el martes -adentrada la tarde- Javier Reyes Romo fue uno de varios personajes que desconocían los pormenores del cierre de campaña (lugar, hora, logística, movilización, etcétera).

Al evento en Plaza de Armas no asistió Ricardo Monreal Ávila. El cierre de la familia se concentró en Fresnillo, donde Saúl Monreal repitió la convocatoria que había logrado en los días previos al debate de aspirantes al gobierno estatal. En el Domo de la Feria también se dejó ver la secretaria nacional de Acción Política del partido Fuerza Por México, Eldaa Catalina Monreal Pérez.

Saúl ha logrado concentrar a las fuerzas políticas que excluyeron Norma Julieta del Río Venegas y Verónica del Carmen Díaz Robles, afianzadas en amenazar a todos los sectores: empresarios, constructores, proveedores, servidores de la nación, candidatos, medios de comunicación, y la basta variedad de expresiones que hayan tenido la mínima diferencia con un David perdido en el exceso de confianza.

Y el cierre de campaña fue el mejor ejemplo. A David lo acompañaron José Xerardo Ramírez Muñoz, Gabriela Evangelina Pinedo Morales y Jorge Miranda Castro, pero el excoordinador de Ganadería no les dio la misma deferencia el domingo anterior en que reunieron a muy pocas personas -para haber conjuntado a tres candidatos capitalinos- a las afueras del Teatro Calderón.

La preferencia de David fue para Fresnillo, Guadalupe y Jerez. En el cierre de Julio César Chávez Padilla (ahora asediado por un audio comprometedor), a David se le notó incluso errático. Perdía el balance corporal fácilmente, y tuvo que ser sostenido por uno de sus hijos cuando se iba de espaldas del escenario. Las redes no tardaron en señalar que llegó ebrio al evento.

Días antes, en una convocatoria bastante reducida y que no mostró la comunidad de la coalición, David invita a algunos cuantos aspirantes a diputados locales a firmar el compromiso sobre la Ley de Remuneraciones que en Zacatecas está vigente desde este quinquenio. Dos de ellas (Gaby Pinedo y Roxana Muñoz) cobraron herramientas legislativas. De la convocatoria, evidentemente, quedó excluido Enrique Manuel Laviada Cirerol.

Igual de chusco resultó el seguimiento de la senadora María Soledad Luévano Cantú a los supuestos vertidos sobre las asociaciones civiles Inclusión Zacatecas A.C., Salud Zacatecana A.C. y Bienzac A.C., pues desconocía que estas organizaciones ya son fiscalizadas por el Servicio de Administración Tributaria, y a ninguna se le ha revocado la autorización pare recibir donativos.

No hay lógica ni correlación entre los resultados de las encuestas que difunden y las decisiones que se toman en las oficinas del Juntos Haremos Historia. Parecieran confirmar que más bien se enfilan a una elección competida, de márgenes reducidos, que de ninguna manera refleja lo que sus mediciones han intentado vender como percepción antes y durante el proceso electoral.


#Casualidades: En Pinos la elección tiende a convulsionar. De acuerdo con los tricolores en esa región, operadores de la candidata Julia Olguín Serna pusieron un par de calcomanías en las puertas de un vehículo de la SECAMPO, encargado de perforar pozos de abastecimiento de agua.

La idea es señalar al gobernador Alejandro Tello Cristerna de “meter las manos en el proceso electoral” con un camión en la parcela de un productor particular. A menos que ese terrateniente les ofrezca millones por una perforación que puede adquirir a un precio más razonable, no hay lógica alguna en el argumento.

Tampoco en tomarle foto a una calcomanía recién puesta encima del logo de SECAMPO, y que evidentemente es reconocible al momento de regresar el vehículo a su lugar de resguardo. Lo mismo sucedió con el tráiler cargado de bultos de cemento, al cual los priistas vieron con ojos de egoísmo pues “ya quisieran” contar con ese recurso, lamentaron.

Los pinenses piden no dejarse engañar. Y le recuerdan a Julia Olguín que tuvo que huir del país por más de una década debido a las denuncias por ejercicio indebido de funciones, abandono de funciones, peculado, orden de aprehensión, inhabilitación y multas millonarias; todas estas patrocinadas por Norma Julieta del Río, su compañera de campaña.

Lo que más les preocupa, comentan, es que quieran enrolar a Alejandro Tello en una elección en la que ha permanecido ajeno. Y no será ni Pinos ni la SECAMPO, aseguran, los que den pretexto para que las artimañas de Morena dañen al priismo, al municipio y al gobierno estatal.

Twitter: @GabrielConV

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