O mejor conocidos como juegos en los que el ganador toma sus recompensas a expensas de sus oponentes. No es el caso, evidentemente, de David Monreal Ávila. Hace una semana Priscila Benítez Sánchez e Imelda Mauricio Esparza modificaron todo el planteamiento político en Zacatecas, y amenazaron con algunas denuncias de las que aún no hay visos certeros.

Sin embargo, el poder político se transformó, y el día de ayer David jugó su última carta con efectos limitados al plano mediático, en donde pesa más el primer lugar a nivel nacional que ocupa hoy como el gobernador más corrupto del país. El de las “Herramientas Legislativas” era un veto que todos los diputados esperaban, una vez conocieran el dictamen en la nueva gobernanza.

Que David saliera a las redes sociales era predecible. Que lo hiciera flanqueado de un perfil como el de Gabriela Evangelina Pinedo Morales, restaba cualquier intento de legitimar su breve discurso como vigía de la “política de austeridad” en la que no está incluida su gabinete. Pero, que el periodista Carlos Loret de Mola llevara al patíbulo a la diputada con licencia, eso fue lo realmente inesperado.

Sólo un diputado conocía la nota que iba a estallar LatinUS este jueves, minutos después de que David presentara su veto: Ernesto González Romo. Legislador pirómano y protagonista de la información (en una plataforma de noticias a la que en otros momentos ha recurrido el senador Ricardo Monreal Ávila), lo suyo es el Juego del Cobarde.

Este consiste en una carrera entre dos rivales. Se trata de ganar por “valentía” mientras se acercan a un precipicio a toda velocidad. Cada uno en un automóvil distinto, será derrotado el primero en frenar (el menos “valiente”). Ninguno quiere detenerse antes que el otro contrincante, el problema es que mientras más se acercan al acantilado menos oportunidades hay de frenar.

En este caso, Ernesto es el rival que corre a toda velocidad hacia el precipicio y sus posibilidades de salir con vida descienden estrepitosamente. Con tal de demostrar “valentía” habrá incendiado la pradera política cuando su vehículo descanse, hecho pedazos, en lo profundo del barranco. Eso sí, de lo que se olvidó LatinUS es de investigar una que habría utilizado como empresa fantasma en Aguascalientes.

González Romo se cruza en todo el entramado de la crisis legislativa que concluyó con la conformación del Bloque Plural Ampliado. Él se encargó de difundir en distintos espacios informativos que las Herramientas Legislativas que vetó David no sólo se aprobaron, sino que las y los legisladores ya cobraban 200 mil pesos mensuales.

En privado, con sorna, respondió a una diputada que encaró su embuste: “yo sé que no las cobramos, pero eso no lo sabe la gente”. No es el único conflicto en el que los daños colaterales que genera Ernesto se vuelven casi irreversibles. Sucedió hace un par de semanas cuando puso en evidencia la contratación de familiares de la diputada Karla Dejanira Valdés Espinoza.

El resultado le explotó en las manos a la “coordinadora” guinda, Maribel Galván Jiménez, que tuvo que renunciar a un punto de acuerdo con el cual se rescindían los contratos de los señalados por González Romo, porque de mantenerlo en el orden del día Karla sometería a votación, entre muchas otras, la permanencia de Adrián Bernardo Pinedo Morales.

Este último es hermano de la secretaria que acompañó ayer a David en su mensaje de “veto”, Gabriela Pinedo. Otro asunto más por el cual resultó un absoluto despropósito incluir juntos, en la misma escena, a David y a quien hoy es ubicada a nivel nacional como una blanqueadora de dinero legislativo y benefactora de un familiar que no asiste a sus labores en el Congreso, pero las cobra.

Los que seguían en la lista eran la diputada Roxana del Refugio Muñoz González (por un concuño contratado en la Legislatura), y personal relativo a los exdiputados Raúl Ulloa Guzmán, Omar Carrera Pérez, Jesús Padilla Estrada, José Dolores Hernández Escareño y Mónica Borrego Estrada (una nuera que ocupa el lugar de asistente en la oficina del diputado José Xerardo Ramírez Muñoz).

Todos basificados y/o con incrementos salariales importantes a días de concluir la LXIII Legislatura, aprobados por Eduardo Rodríguez Ferrer. Esa información la conocía de primera mano Ernesto González, pues fue uno de los primeros en asediar a Javier Albano Bernal para que rindiera los pormenores de los dineros de los diputados y la relación del personal. Bastó mover una carta para derribar el castillo de naipes y generar otra crisis.

Las cortinas de humo que el Bloque Plural Ampliado no ha sabido dispersar de manera precisa, y el caos interno provocado de manera deliberada por un agente como González Romo, son parte de una estrategia para anestesiar y paralizar a la LXIV Legislatura. Los mensajes simultáneos de este jueves en LatinUS y en la nueva gobernanza no son simple coincidencia.

Pareciera que un golpe proveniente de la Ciudad de México intenta derrumbar la mínima estabilidad en la General de Gobierno, y con la misma fuerza del impacto los davidistas empujan al Bloque Plural Ampliado a acelerar el empoderamiento del Poder Legislativo. En la próxima sesión iniciarán las definiciones y la LXIV mostrará su nuevo rostro, mientras David patalea y patalea.


#Casualidades: Santacruz Márquez Zulema Yunuén, a favor con la reserva. Rodríguez Camarillo Martha Elena, a favor con la reserva. Benítez Sánchez Priscila, a favor con la reserva. García del Muro Ana Luisa, a favor con la reserva. Galván Jiménez Maribel, a favor con la reserva.

Figueroa Rangel José Luis, a favor con la reserva. Delgadillo Ruvalcaba Armando, a favor con la reserva. Ortega Rodríguez Sergio, a favor con la reserva. Cerrillo Ortiz Violeta, a favor con la reserva. Muñoz González Roxana, a favor con la reserva.

Miranda Herrera Georgia Fernanda, a favor con la reserva. Ramírez Muñoz José Xerardo, a favor con la reserva. De la Torre Delgado Humberto, a favor con la reserva. Barragán Espinosa Susana, a favor con la reserva.

Eso es lo que relatan las páginas 38 y 39 del Acta de la Sesión Legislativa del 14 de diciembre del 2021, en la que se aprobó por abrumadora mayoría la reforma para incluir recursos de ayudas sociales (Capítulo 4000) en el gasto de las y los diputados. Las famosas Herramientas Legislativas.

No es la lista que supuestamente Ernesto González Romo entregó a David Monreal para que la leyera en su mensaje de “veto”. Son los votos reales que llevaron la pugna entre el Ejecutivo y el Legislativo a quebrar su mayoría de “aplanadora”.

Los estragos comienzan a sentirse. “En Morena no venimos por oficinas ni por puestos” expresó con evidente enojo en sus redes sociales Violeta Cerrillo cuando, paradójicamente, acusó a sus compañeros de intentar quitarle una oficina y un puesto.

Ahora que Julio César Chávez Padilla ocupaba de su ayuda como presidenta de la Comisión de Hacienda y Fortalecimiento Municipal, para refinanciar la deuda municipal, Violeta bien puede recordarle que no llegó ahí por “oficinas” o “puestos”.

Twitter: @GabrielConV

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