Es el mismo silencio que comparte con Raúl Brito Berúmen. No es coincidencia que el proyecto “Capital Iluminada”, con recursos por 66 millones de pesos (de acuerdo con la información oficial), haya “pasado a oscuras” en la Auditoría Superior del Estado por el entramado de empresas fantasma involucradas.
Brito y Miranda conocen al dedillo a Julio César González Hernández, operador de ferias municipales, contratación de artistas (mediante empresas fantasma) como Ángela Aguilar, instalador de pistas de hielo desde el sexenio de Miguel Alejandro Alonso Reyes, arrendatario de equipos de sonido para espectáculos y conciertos, entre sus ventas conocidas.
Hasta que el negocio de las luminarias cayó en sus manos para diversificar sus actividades económicas a través de facturadoras irregulares. Como la que dijo encontrarse instalada en un local de venta de telefonía celular en el municipio de Jerez, pieza clave de la triangulación de recursos en la iluminación municipal capitalina.
No vamos a hacer en esta columna la tarea que Brito Berúmen no ha querido realizar para no afectar a su socio Miranda Castro. Sin embargo, parte de las diferencias que mantuvo Pablo Torres Corpus con el exalcalde residieron en que, como Secretario de Finanzas y Administración del municipio, nunca se prestó a la estafa “iluminada”.
Torres Corpus entendía el tinglado que tejieron Jorge y Julio César González (empresario de las mayores confianzas de Le Roy Barragán Ocampo), y sabía muy bien que la pieza más débil en la triangulación de esos 66 millones de pesos por compras a sobreprecio terminaría por ser él mismo.
Renunciar a ese puesto fue una decisión que Pablo tomó con cabeza fría después de examinar los cimientos del contrato. Todo se trataba de un negocio sin una sola arista de credibilidad, ya que descansaba en el sobreprecio de la licitación y una empresa “fachada”. Un negocio que, todavía hoy, supura corrupción por donde se analice.
¿Qué podría esperar entonces Miguel Ángel Varela Pinedo de un ente como la Auditoría del Estado que ha sido cómplice desde el día uno de la administración de Miranda Castro? Encubrimiento en la medida de lo posible, eso es seguro. Empero, dependerá del nuevo gobierno capitalino que las cuentas pendientes no queden sólo en eso.
Este lunes, Varela Pinedo rindió el primer informe sobre las irregularidades encontradas en el municipio de Zacatecas, tan sólo en los meses de enero a septiembre del 2024. Debido a que la entrega-recepción no abarca periodos anteriores, no es facultad de este ayuntamiento sancionar lo que Brito no sancionó por su complicidad con Jorge.
Hablar del desfalco de las finanzas municipales por más de 120 millones de pesos (una nota que debería ser portada, sí o sí, en distintos medios impresos y electrónicos) en apenas nueve meses de gobierno, es entender en plenitud que -en efecto- Jorge Miranda es un “genio de las finanzas”… siempre y cuando sea para perjudicarlas.
Dos de estos son puntos nodales en la fiscalización de recursos: el gasto en publicidad de Jorge Miranda Castro (no del ayuntamiento) se triplicó en año electoral. Premisa suficiente para que José Ángel Yuen Reyes hubiera declarado la nulidad de un eventual triunfo del candidato guinda, si hubiera regido con imparcialidad sus sentencias.
Recordemos que la Sala Superior confirmó que, a falta de un elemento objetivo sobre la presunta compra de espacios de publicidad del candidato del PAN en distintos noticieros, se ratificaba el triunfo de Varela Pinedo. No así en el caso de Jorge, pues el incremento en el gasto de publicidad anunciaba -de manera anticipada- la compra de los mismos espacios (o más).
Y segundo, de acuerdo con el Código Penal del Estado en su artículo 228, el delito de “usurpación de funciones” tendría repercusiones directas en este proceso de entrega-recepción. Como ya es del conocimiento público y obra en los expedientes del Órgano Interno de Control municipal, Ruth Calderón Babún se encuentra dentro del supuesto.
Varela Pinedo aseguró que existe documentación rubricada por la entonces candidata a diputada del partido Morena, tiempo en que había solicitado licencia al cargo para realizar actividades de proselitismo político electoral. Ello obligaría, de inmediato, a la integración de una carpeta de investigación penal en la FGJEZ. Estaría por definirse si se realiza de oficio (como lo establece el Código Nacional de Procedimientos Penales) o a mediante querella de la autoridad municipal.
Esta se acumula a las denuncias por enriquecimiento ilícito que fueron iniciadas durante la campaña y que, confirman fuentes oficiales, se realizaron con información fidedigna y verídica sobre las propiedades a nombre de Jorge Miranda y su familia. Aunque, claro, la fiscalía de Salvador Eduardo Villa Almaráz parece que sólo persigue enemigos políticos, como fue el caso de quien redacta este espacio.
Pero, ¿ahora con qué puesto en el gabinete premiará David Monreal Ávila a Jorgito “El Buscachambas”? De la factura por más de 20 millones de pesos para la compra de combustible a “La Villita” (otra propiedad de Miranda) horas antes de abandonar el ayuntamiento por la puerta de atrás ¿le reportó un porcentaje a quien ahora le exige una cartera en la nueva gobernanza?
#Casualidades: Cuando aseguramos que Saúl Monreal Ávila no ha entendido el contexto de la elección 2027, es que en verdad tiene la brújula perdida. Sólo a él se le ocurre fotografiarse con quien anuló la elección de la capital zacatecana.
El magistrado José Ángel Yuen Reyes asistió a la sede del Senado de la República la semana pasada para participar en un encuentro entre autoridades electorales jurisdiccionales y legisladores de la Cámara Alta.
Yuen Reyes pretende cobrar el favor a David y a Saúl por su sentencia para invalidar los resultados que dieron el triunfo a Miguel Ángel Varela Pinedo, y que luego revirtió la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación.
Como aspirante a una magistratura en alguna de las sala regionales de ese tribunal (la más probable, en Monterrey) será el benjamín de los Puebla de Palmar el que se encargue del cabildeo de un magistrado a todas luces parcial.
Más vale tener un aliado en aquella Sala Regional, pues ya se imagina incluso como ganador de la elección del 2027 y con autoridades electorales calificando y validando su triunfo. Claro, con un magistrado a sueldo, lo que confirma la complicidad conocida en el TRIJEZ.
Esperemos que en su “asamblea informativa” del próximo 15 de diciembre muestre esa fotografía. Si no tiene nada qué ocultar, debería incluirla en su “rendición de cuentas” con fines electoreros. Total, Javier Torres Rodríguez le sigue regalando tiempo de vida sin presentar las irregularidades de la entrega-recepción en Fresnillo.