Los “acordeones” del Bienestar, versión La Secta de Zacatecas, comenzaron a circular el miércoles de la semana pasada en distintos municipios del estado. Fueron del conocimiento de las redes sociales hasta hace dos días, y trajeron bastantes sorpresas para algunos participantes a la elección de jueces y magistrados.
La más llamativa, sin duda, fue que no incluían a Osvaldo Cerrillo Garza como aspirante a la Primera Sala Penal, en el Tribunal Superior de Justicia del Estado de Zacatecas. Pese a que durante su campaña contó con facilidades otorgadas por la nueva gobernanza y existía entendimiento con el que se dice “gobernador”, algo sucedió en el camino.
Algo que ya se había visto en otras elecciones, pero parece que tiende a minimizarse en la vida política de Zacatecas. No importa cuántos compromisos extienda David Monreal Ávila (y a veces sólo hace como que acuerda), la voluntad de Verónica del Carmen Díaz Robles es la que impera en las filas de los servidores de la nación.
Se ha insistido varias veces en este espacio que es ahí donde reside la verdadera elección del 2027. No en la lucha de Saúl Monreal Ávila en contra de las reformas de Morena para impedir el nepotismo, ni el riesgo de permanecer o no en el movimiento que dice que fundó Ricardo si el partido guinda le quita la reelección electoral.
No es ahí donde se encuentra todavía el poder de movilización de Morena, pues las definiciones electorales aún pasan por la imposición de Verónica Díaz en todo lo que tiene que ver con los padrones del Bienestar. Claro que “imposición” no es sinónimo de una operación efectiva en campo.
Eso fue parte de lo que ayer le reclamó a la senadora el “Muy Respetable Gran Maestro” de la Gran Logia de Zacatecas, Oscar Gabriel Campos Campos. La de Morena había vendido la idea de que “todo estaría bajo su control”. No obstante, cuando los “acordeones del Bienestar” se filtraron en medios, todo comenzó a tambalear.
En efecto, el reclamo de Campos Campos no sólo retrata un acuerdo de facto para “prestar” las estructuras del Bienestar a las y los aspirantes a jueces y magistrados que contaran con el aval de David Monreal y Verónica Díaz, sino que también confirma que las y los aspirantes debieron “pedir permiso” a la Secta.
Y eso de “pedir permiso” es una simple expresión figurativa para encubrir el cobro de movilización del voto duro del Bienestar. En distintos centros de operación en los que fueron citados los servidores les advirtieron que recibirían recursos para la compra de sufragios por el orden de los 200 pesos (el más barato).
Algunos servidores de la nación que tuvieron comunicación con este espacio, confirmaron la instrucción que provenía desde el Senado de la República, y por la que fueron convocados en las coordinaciones que supervisa el presidente (adjunto) estatal de Morena, Rubén Flores Márquez.
Vecino del séquito de la senadora, quienes adquirieron en efectivo distintas propiedades en las privadas Puerta Engracia y San Rafael (de la colonia Colinas del Padre), el silvestre dirigente que clama por las votaciones democráticas del pueblo es uno de los que organiza esta movilización con dinero público y privado.
Esta es la verdadera vocación “popular” de los del Bienestar. Poner a renta una estructura del gobierno federal para beneficios particulares (si las y los afortunados pasaban el primer filtro de “caerle bien” a David y a Verónica), cuyo motor monetario se pondrá en funcionamiento este viernes cuando les entreguen los recursos a los serviles de chaleco guinda.
Para que no quedaran pruebas de las instrucciones que recibían del partido, en cada reunión a las que citaron a los servidores les retiraron los celulares, así como en la subdelegación del Bienestar. Empero, las versiones coinciden sobre la forma en que debían operar y las tareas que debían desempeñar a petición de Morena.
Igualmente informaron de la cacería de brujas que se desató en las oficinas de Adilene Rosales Romero, para saber quién había filtrado los “acordeones del Bienestar” y la lista de “consentidos” de la nueva gobernanza, algunos de los cuales incluso tuvieron que cubrir una cuota sustanciosa para poner en marcha la estructura de voto.
Sin embargo, los videos y las imágenes que circularon en redes sociales pusieron en buen predicamento a quienes ya pagaron por miles de “votos”. Posiblemente de ahí provenga la molestia que le expresó el “Muy Respetable Maestro de la Gran Logia” a la senadora Díaz Robles.
¿Tanto dinero para terminar en ridículo? Así quién no se enoja. Por cierto, todo sucedía en las narices de la Junta Local del INE en Zacatecas, el Consejo General del IEEZ, y la Fiscalía Especializada en Atención de Delitos Electorales, de la FGJEZ. ¿Ni una investigación de oficio? ¿Nada?
#Casualidades: La mejor manera de publicitar la cancelación del viaducto elevado en Zacatecas, era aquella que no se concentraba en la capital del estado. Y así lo hizo Miguel Ángel Varela Pinedo en una gira de medios por la Ciudad de México.
Logró visibilizarse como un alcalde opositor que mantuvo un frente de conflicto con David Monreal Ávila, que insiste en inyectarle reflectores a su candidatura cada que tiene oportunidad, a través de Rodrigo Reyes Mugüerza.
Las declaraciones del aspirante favorito de la nueva gobernanza en contra de “los corruptos opositores”, aún sin mencionar nombres funcionan en sentido contrario. Prácticamente logran lo que dicen que quieren evitar.
En ese margen de posibilidades Varela Pinedo asistió a distintos espacios informativos de la capital del país para posicionar la marca panista, como fue presentado en noticieros como el de Ciro Gómez Leyva, entre otros.
Esa es la narrativa que impuso el de Tlaltenango, y en la Ciudad de México la adoptaron con bastante facilidad, pues entienden, de entrada, que el gobierno de la capital de Zacatecas es uno del color distinto al guinda de Morena.
Nadie reparó en el discurso de Rodrigo Reyes. Que si los jueces, que si la corrupción del Poder Judicial. Sus declaraciones no permean en la opinión pública, y en cambio le abre la puerta una y otra vez a quien apuesta será su rival en las boletas del 2027.