Antes de que concluya el mes de julio, la dirigencia nacional del PAN deberá de renovar su presidencia, de acuerdo con la convocatoria que fue lanzada a la militancia semanas atrás. El proceso interno no parece dirigirse a un método abierto de consulta ciudadana, sino únicamente a sus afiliados.
En la carrera por sustituir a Marko Cortés Mendoza, todo apunta a que el coordinador de la bancada albiazul y líder de la Junta de Coordinación Política en San Lázaro, Jorge Romero Herrera, pudiera encabezar al partido en consenso de unidad contrario a la propuesta de abrir la votación a la población en general.
Esta sería la primera etapa por consumarse, previo a los reacomodos locales que ya levantan especulaciones en algunos medios de comunicación. De prevalecer la propuesta de la candidatura de unidad, en los estados podría replicarse el mismo escenario con la finalidad de no polarizar a la militancia.
El Partido Acción Nacional actualmente se posiciona como la segunda fuerza política en el Congreso de la Unión, y representa a cerca de 11 millones de habitantes en el país. Mientras que en Zacatecas, la elección del 2 de junio consolidó al partido como la tercera fuerza electoral, por debajo de Morena y del PRI.
De acuerdo con los cómputos distritales del Instituto Electoral del Estado, el PAN acumuló 78 mil 547 sufragios; mientras que en los cómputos municipales sus números crecieron hasta los 87 mil 80 votos. Lo que pone en un escenario de relieve a quien reemplace a la jerezana Verónica Alamillo Ortiz.
La actual dirigente estatal ha confirmado, al interior de los pasillos del partido, que reconoce no alcanzar condiciones para pensar en un nuevo periodo como presidenta estatal. Lo anterior proyectó una primera lista de posibles aspirantes en donde se anotan nombres bien conocidos en Acción Nacional.
Ricardo “Chicarcas” Flores Suarez del Real, José Manuel Viramontes Rodarte “Pepe Pasteles”, Osvaldo Contreras Vázquez y José Guadalupe Correa Valdés, suenan hasta el momento. Se ha especulado sobre la posibilidad de que el exdiputado Pedro Martínez Flores también pudiera participar.
Sin embargo, el de Calera ha elegido apoyar un perfil distinto, que refleje el arraigo del panismo en el estado, al mismo tiempo que exija se renueven los estatutos del PAN con la finalidad de abrir el partido a la sociedad civil. Dejar el sectarismo a Morena y disminuir la brecha dogmática de los albiazules con la ciudadanía.
Se trata de Carmelo Anceno Rivas, panista de cepa en el municipio del Teúl de González Ortega, que coincide con la visión del candidato a la dirigencia nacional, Jorge Romero, en cuanto a la necesidad de replantear el ingreso del PAN a la coalición con el PRI y el PRD, por los costos político-electorales que atrajo esa decisión.
Como en el caso del Teúl, en donde la militancia prefería respaldar el proyecto de un empresario conocido en la zona, pero la decisión de Verónica Alamillo para ceder la candidatura al PRI empujó el triunfo de Morena en un municipio que bien pudo haber retenido Acción Nacional.
Carmelo ha acompañado en buena parte de su trayecto en el partido a Pedro Martínez. Comparten la ideología del panismo, pero no desde los principios radicales que hoy alejan al partido de otro tipo de segmentos de votantes, a los que no se puede llegar con un perfil político obtuso.
No obstante, el problema principal que plantean, y dependerá en buena medida de lo que suceda en julio dentro del Comité Ejecutivo Nacional del PAN, es qué método de elección deberían de adoptar en Zacatecas para no fracturar a la militancia, en un momento en que se levantan como tercera fuerza electoral.
Más que los proyectos que concursen -que no deberían ser muy distintos a los que se escucharon en las campañas- el panismo hoy cuenta con representación en la capital del estado mediante el gobierno electo de Miguel Ángel Varela Pinedo, así como un buen margen de votos en Fresnillo.
Lo anterior gracias a que abrieron las puertas a la ciudadanía que merecía estar en las boletas, como es el caso del empresario “Chuy” Badillo y su familia. Otro de los que aportó más votos al PAN, paradójicamente, fue Roberto Luévano Ruiz, con 11 mil 589 sufragios en la elección municipal de Guadalupe.
Mientras que “Maritere” López García acarreó 8 mil 506 votos a su partido, por encima de lo que le aportó el PRI en el distrito 3. De ahí que el panorama resulte muy tentativo para quienes participen en la renovación de la dirigencia local. Hay PAN para rato en Zacatecas, y se encuentran en un momento político electoral de trascendencia.
#Casualidades: En un oficio dirigido a Humbelina López Loera, titular de la SFP, la regidora de Fresnillo, Laura Herrera Márquez se refirió a la petición pública que realizó en la sesión de cabildo del pasado 28 de mayo.
Se trata de la solicitud para remover de su cargo, por la conducta imparcial que demostró durante el proceso electoral el titular del Órgano Interno del Control del municipio, Arturo Torres Luna, pues operó en favor de las y los candidatos del partido que actualmente gobierna el municipio.
Entre algunas irregularidades, la regidora Laura Herrera señala que no existen, a la fecha, informes financieros del flujo de recursos hacia las ferias de Fresnillo en sus ediciones 2022 y 2023.
Así como un fuerte dispendio en el Capítulo 4000, para la compra de la franquicia de basquetbol del municipio, en el que se sospecha un doble gasto. Todo lo anterior en las narices de Torres Luna, que ahora busca brincar al órgano interno del IEEZ.
Hasta el momento, la Cuenta Pública 2022 de Fresnillo sólo observa cerca de 1 millón y medio de pesos. Sin embargo, la ASE debería profundizar sobre los señalamientos que se han hecho con anterioridad en su cabildo.
La Auditoría ya tiene en sus manos observaciones al gasto en obra pública, gracias a las investigaciones periodísticas que publicó este portal electrónico con respecto a la posible triangulación de recursos a ciertas empresas que favoreció Saúl Monreal Ávila en licitaciones, adjudicaciones y concursos amañados. Veremos hasta dónde llega Raúl Brito Berumen.