Por segunda ocasión en este 2020, Saúl Monreal Ávila tiene que salir a hacer el trabajo que el “equipo” de su hermano David no hace. Más visceral que político, el presidente municipal de Fresnillo otra vez pidió la renuncia de Adolfo Bonilla Gómez, al igual que la solicitó en enero con motivo de la celebración del cumpleaños del Secretario del Campo en el hotel Don Miguel.
“Ahorita no es momento, primero no debe estar opinando en política, porque es funcionario y todo el recurso que maneje, cómo se va a interpretar, es una irresponsabilidad esa declaración” que otorgó Bonilla Gómez en una charla de café con Gerardo de Ávila González, director de El Sol de Zacatecas, el pasado viernes.
A partir de la fiesta de enero, con la que Adolfo removió los ánimos de los tricolores, desde la administración municipal de Fresnillo se enfilaron las pilas contra el cumpleañero. En la agenda municipal se cancelaron los eventos donde participaba el hijo de José Eulogio Bonilla Robles y, en cambio, se le abrieron las puertas a Roberto Luévano Ruiz.
Su conferencia de este lunes era espacio perfecto para que Saúl refiriera a todos los aspirantes priístas que tienen un cargo oficial en la administración estatal (tres de ellos) y que estarían en su supuesto del uso de recursos públicos (los cuatro), como lo indicó el edil. Tan solo este fin de semana Agenda Política evidenció la entrega de propaganda casa por casa a nombre del de SEDESOL.
El panfleto de Luévano llegó a los municipios con mayor cantidad de votantes; 14 de ellos en total. Una estrategia de último minuto para crecer en conocimientos en las encuestas donde todavía permanece muy lejos, sin tomar en cuenta aquellas donde ni siquiera aparece. Aún y con ello, “El Cachorro” decidió enfrascarse con Fito; situación muy distinta a la del 2019.
Fue prácticamente hace un año, el 19 de agosto de 2019, cuando por primera vez El Sol de Zacatecas publica una entrevista donde Adolfo Bonilla se define en el mismo sentido en el que lo hizo hace unos días. La nota principal de esa edición se llamó “Adolfo Bonilla sí quiere ser gobernador, pero no le gana la ambición”. En aquél entonces desde la presidencia municipal de Fresnillo no hubo refunfuño.
Pero, en algo ha cambiado la posición de Saúl Monreal, ahora más firme, al bajarse de las encuestas que lo midan con David y atrincherarse en la reelección en Fresnillo. A menos que la marea deje en naufragio al de Ganadería, el presidente municipal vendría como relevo natural. De no ser así, El Mineral se convertirá en el centro de operaciones más importante del monrealismo.
Esa es la centralidad que adquiere Saúl en estos momentos, al mismo tiempo que pone prioridad en su gobierno y trata de saldar una cuenta que David le endoza porque cree que en las dos elecciones a gobernador “El Cachorro” y “El Chamuco” favorecieron su derrota. Sin embargo, el presidente de Fresnillo debe de cuidar que, al tomar la batuta del monrealismo, no cargue con los errores de David.
El más evidente y por el cual Saúl tendría que haber cuidado sus palabras: si a David Monreal lo destapó Ricardo desde agosto del 2018 y no ha renunciado a su Coordinación, incluso con un programa federal inactivo y denuncias por el uso electoral de recursos públicos, ¿por qué los demás sí tendrían que renunciar a sus cargos?
Las preferencias de la elección parecen inclinarse por la marca Morena, sea cual sea su candidato. Sin embargo, en Zacatecas la ciudadanía asistirá a las urnas para decidirse por revivir el monrealismo o debilitarlo otros seis años. Esto en caso de que David alcance una candidatura que dejó de tener esa certeza con la que se le veía en el partido al que no está afiliado, y en Palacio Nacional.
La pasada visita presidencial también evidenció un muro impuesto contra Ricardo Monreal Ávila, quien no pudo dar de propia mano a Andrés Manuel López Obrador una copia de su libro “La Infamia”, aún y cuando el presidente figura como uno de los personajes centrales del texto. Y es que, el senador de Morena tuvo que escuchar noticias de la gira oficial desde Fresnillo, alejado del líder de la 4T.
Otro que apareció distante, pero de la militancia priísta, fue Alejandro Tello Cristerna. Recién renovado el Consejo Político estatal de su partido, dispuestos a rendir protesta a los representantes municipales del tricolor, Tello prefirió el mensaje vía remota que su presencia en el partido que lo llevó al poder, tal como se lo recordó Alejandro Moreno Cárdenas.
Acompañado de Miguel Alejando Alonso Reyes y de Pedro de León Sánchez, “Alito” puso como fuerza gravitacional y activo más importante del priísmo al mandatario estatal, algo propio de sus cánones. No sin dejar de recordarle que se debe al partido con el que hoy rompe uno de sus formalismos, como el ausentarse en eventos que tienen valor simbólico entre sus correligionarios.
Quienes conocieron del encuentro posterior entre Alonso Reyes y Moreno Cárdenas afirman que la plática del presidente nacional del PRI y su secretario adjunto tuvo como objetivo un diagnóstico de las condiciones políticas de Zacatecas rumbo a la elección 2021. Próximamente se verá la influencia del exgobernador en el escenario local.
#Casualidades: Ni negó ni aclaró los hechos que ocurrieron la madrugada del domingo en el restaurante Gran Sonora. Por el contrario, Cuauhtémoc Calderón Galván sólo pudo confrontar una nota del diario Imagen de Zacatecas, aludiendo que “no corresponde con la realidad”.
Entre dos y tres de la madrugada, dos personas que salían del restaurante (a esas horas convertido en antro) realizaron dos detonaciones de arma de fuego. Esa fue la versión oficial que dio la Policía Estatal Preventiva, después de atender al reporte por el incidente ahí ocurrido.
Fuentes consultadas por Agenda Política confirmaron lo que los cuerpos de seguridad dieron a conocer a Imagen de Zacatecas. En efecto, se desplegaron dos patrullas de la estatal para atender lo que ocurría afuera del polémico restaurante/bar/antro.
¿Con los negocios no, pero con las personas sí? ¿Qué pasa con la autoridad municipal que no se hizo presente ni para cerrar el lugar a la hora determinada por los lineamientos sanitarios? ¿Hasta donde tocan los intereses de David Monreal Ávila en el municipio, convertido plenamente en su “caja chica”? ¿Cuáles fueron los hechos que sí “corresponden con la realidad” según Cuauhtémoc?
Asumirse víctima de su propia soberbia sólo hace más evidente la operación político-financiera de la que forma parte el dueño del lugar. El contubernio llega hasta las oficinas de Julio César Chávez Padilla.
Twitter: @GabrielConV