Hay algo claro: el debate de aspirantes a la gubernatura retrató al cuarto de guerra de la candidata Claudia Edith Anaya Mota más bien como un cuarto de catarsis, no de análisis y estrategia. La del Va Por Zacatecas quedó a deber la figura parlamentaria a la que nos había acostumbrado, y se mostró menos preparada para un encuentro que no requería de grandes esfuerzos.

Miriam García Zamora la puso en jaque en un mismo movimiento: al referirse a su familia y a la fundación que encabezan, la senadora con licencia dejó salir a esa persona impaciente que se ha encargado de atenuar en todos estos meses, y sin disipar el tema. Miriam no ameritaba mayores consideraciones, pero Claudia se enganchó fácilmente en el cebo.

Por el formato que aprobó el Instituto Electoral, la del Va Por Zacatecas necesitaba que los activos en su coalición prepararan el terreno previo a los asuntos que trataría. A la fecha ni Enrique Flores Mendoza ni Raymundo Carrillo Ramírez ayudan a fijar agenda, suben a los temas, pronuncian posturas, contrastan opiniones con la oposición, ni promueven el trabajo político.

Noemí Berenice Luna Ayala en buena medida hace lo suyo con el acompañamiento de Marko Antonio Cortés Mendoza, más enfocados en la zona de Los Cañones. Aunque en esta elección, la dirigente albiazul tampoco ha subido a los telones públicos a polemizar. El diagnóstico es el de una coalición con muy poca presencia en la agenda pública de Zacatecas.

El debate era una oportunidad para terminar de remachar el extenso menú de controversias alrededor de la figura de David Monreal Ávila, si es que la coalición hiciera lo que le corresponde. Sin embargo, todo concluyó en un episodio bochornoso para su candidata, quien demostró que sí le duele el tema familiar y que ese traspié la desequilibró durante el resto del evento.

No han terminado de entender que los rivales les ofrecen todas las facilidades para que, a estas alturas, ya presentaran una marcada diferencia favorable en las preferencias, según sus números. De qué le sirve a Claudia tener el cuarto de guerra que David no tiene (y del que nadie se responsabiliza), si no lograron medir los requisitos para este domingo.

No había necesidad de presionar al ex coordinador de Ganadería en un tema casi ausente en toda la campaña de Claudia Anaya, como lo es el Crédito Ganadero a la Palabra. Y en donde tenía que empujar la del Va Por Zacatecas, no puso el énfasis suficiente para traer al público a ese David que repite infantilmente “es mentira, es mentira, es mentira”.

Cuatro videos de los “manoseos involuntarios”, y ni una sola referencia que incitara la opinión del flagrante acosador. De las otras dos candidatas que presentaron una queja por violencia política en razón de género tampoco hubo pronunciamientos contundentes. Guadalupe Medina Padilla y Ana María Romo Fonseca se dedicaron a capitalizar sus propios votos.

Nadie refutó a David Monreal en tres temas básicos: endeudamiento (con intereses de la deuda), adeudos de cuotas al IMSS y el traslado de la nómina magisterial a la federación. Los referentes a las cuotas patronales y el pago de salarios a los maestros, el candidato intentó gestionar fallidamente recursos, desde el 2018, que la federación le negó.

Todavía en enero del 2020, una docena de presidentes municipales afines lo acompañaron a las oficinas de Zoé Robledo Aburto para negociar sus pasivos. A su retorno, Julio César Chávez Padilla convocó a una rueda de prensa en la que dijo que, gracias a David “el amigo del presidente”, las deudas con el Seguro Social se saldarían.

Nada más falso, pues a la fecha siguen arrastrando los déficits. Lo mismo que en el traslado de la nómina magisterial. En mayo del 2019 la bancada monrealista grabó un video de su visita al subsecretario de Educación, Héctor Garza González, quien calificó a David como “hermano” y se comprometió a gestionar el traspaso.

Como cabeza de la Secretaría de Finanzas, en ese entonces Jorge Miranda Castro lamentó que su hoy candidato se arrogara gestiones que no eran suyas. Los recursos extraordinarios con los que hasta el momento se paga la nómina, dijo, se han liberado a petición de Alejandro Tello Cristerna, no por los infructuosos intentos del supuesto “amigo del presidente”.

Al ex de Finanzas y a Cuauhtémoc Calderón Galván (cada vez más alejado de David), el candidato de Juntos Haremos Historia no les da las consideraciones necesarias. Uno encargado de la obligatoria administración de los adeudos, y el otro, el operador de los empréstitos en la LXI Legislatura. Ambos complementarios, resultan enteramente desechables en el discurso “anti-prianista”.

Ninguno de estos elementos estuvieron presentes en las brevísimas posturas de este domingo. De hecho, ninguna de las y los candidatos necesitaban más de un minuto para desagregarlos. El autor intelectual detrás de Miriam García lo previó con certeza, y probablemente no esperaba la sorpresa que se llevó hace un par de días.


#Casualidades: El acercamiento de Gustavo Uribe Góngora al proyecto de David Monreal Ávila se dio hace algunos meses. El puente de enlace: Le Roy Barragán Ocampo. Todo marchaba conforme a un supuesto acuerdo, hasta que llegó Marco Antonio Flores Sánchez.

El “a chingar su madre Uribe fue la bomba que detonó el ánimo del priista. Los canales de comunicación que había logrado el de Monte Escobedo se dinamitaron por un súbdito de la talla de Enrique Eduardo Bernáldez Rayas.

Casi como manager del cantante, el suplente de Enrique Manuel Laviada Cirerol aplaudía los eventos donde la misoginia y el discurso del odio no podían faltar. La política y sus acuerdos eran lo de menos, pues al pueblo pan y circo, y a falta de pan…

Hoy, el bastión de Pinos es uno de los más competidos en el estado. Empero, los disparates del cantante vernáculo echaron a perder el trabajo fino del ex Secretario del Congreso, y dieron razones para que Uribe Góngora se apertrechara con Herminio Briones Oliva.

En el caso del secretario de Desarrollo Social, Roberto Luévano Ruiz despejó esas dudas hace tiempo. La catástrofe que sufren en el D21 es pretexto suficiente para no entrar a un proyecto a la cola de la fila, donde la expectativa más probable es que se le haga un ofrecimiento de medio pelo.

Confirma a Agenda Política que su interés es gobernar Zacatecas, y que él cree firmemente en el proyecto que encabeza Claudia Anaya Mota. Más vale cabeza de león que cola de ratón monrealista.

Twitter: @GabrielConV

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