Era un tema muerto. El pasado 9 de agosto el diputado Omar Carrera Pérez había declarado cancelados, por segunda ocasión, los foros de socialización sobre las reformas a la Ley del ISSSTEZAC. Sin embargo, la presencia de David Monreal Ávila en el recinto de la LXIII Legislatura este viernes, revivió las modificaciones que, según el candidato electo, se aprueban porque se aprueban.

A estas alturas han perdido todo consenso posible con los gremios sindicales, aunque Omar Castruita Hernández asegure que la Sección 58 apoya la reforma. Lo podrán afirmar sus líderes. La base sindical, por el contrario, se alista a la movilización y radicalización de ser necesario. Y el panorama comienza a transitar por el carril de la confrontación.

El lunes por la tarde, la Comisión de Régimen Interno y Concertación Política aprobó que, hoy martes, se discuta y vote en el pleno un periodo extraordinario a realizarse a más tardar en los próximos ocho días. La propuesta fue presentada por Jesús Padilla Estrada, coordinador de bancada de Morena, sin incluir copia del dictamen que pretende avalarse.

El pretexto es que, como ese dictamen primero debe leerse en el pleno (pues ya pasó por la Comisión de Parlamento Abierto, después de que se obviaran los trámites en la Comisión de la Función Pública), las y los legisladores deben esperar a conocerlo unas horas antes de que presten sus votos. Pocas dudas quedan de que su contenido está completamente relacionado con la propuesta de Alejandro Tello Cristerna.

La bancada monrealista ha logrado conjuntar todas las condiciones necesarias para que las bases sindicales nuevamente se movilicen en la sede del Congreso, tal como sucedió a finales de junio. Por una simple necedad, David podría repetir la escena que vivió Alejandro Tello en 2015, cuando Morena le impidió rendir protesta como gobernador en ese recinto. Ahora tocaría a los gremios laborales.

Este martes sabremos cuáles de las y los diputados de la coalición Va Por Zacatecas se prestan al juego de Morena, cuando la Comisión Permanente llame al periodo extraordinario que tiene como objetivo iniciar la administración de David Monreal sin un boquete fiscal del tamaño del ISSSTEZAC. Para ello, la clase trabajadora que los apoyó en campaña será la primera en ser sacrificada.

¿Cuál es la urgencia real? Que David no tiene preferencia en el trato de Palacio Nacional y, por ende, en la gestión de recursos. Será lo primero que se note en el próximo presupuesto que presente Andrés Manuel López Obrador para el ejercicio fiscal 2022, a tal nivel que los indicios llegan a nivel municipal. El primero en delatarlo fue Jorge Miranda Castro en sus giras por las colonias de la capital.

A sus votantes les ofrece un remedio administrativo que pueda combatir la austeridad con más austeridad, aunque signifique llevar a la inoperatividad el trabajo del ayuntamiento por unos meses. Son 396 las plazas de contrato y de confianza que puede dar de baja al momento de iniciar su administración, y equivalen a un gasto por 6 millones 709 mil pesos.

En las colonias, Jorge asegura que reducirá la burocracia al eliminar los casi 400 espacios de nómina, esto debido a que en el municipio escasea el dinero y se deben buscar las mejores alternativas para hacer más con menos. Insiste en cada una de sus visitas en preguntar, otra vez, qué servicios básicos son los que más requieren los colonos, y asegura que serán garantizados con el recorte de personal.

Lo que no explica es que, de las casi 400 plazas, 280 corresponden a las funciones operativas como la limpia en espacios públicos (hormiguitas), bacheo, cambio de luminarias, y de otros servicios que él quiere garantizar en lo inmediato. Son personal de contrato y de confianza que se heredan de otras administraciones, tal como entregó Judit Guerrero López a Ulises Mejía Haro.

Los restantes 120 espacios sí pertenecen a la nómina que empujó el ex candidato del partido Encuentro Solidario, y que irremediablemente serán los primeros en abandonar sus lugares. En la entrega-recepción municipal Miranda Castro cuenta con recursos para liquidar y/o recontratar a cualquier de esas 400 personas. Empero, él promete deshacerse del total sin explicar cuántas plazas utilizará para cumplir sus compromisos de campaña.

Con una administración que trabajará a marchas forzadas y en la merma de sus capacidades (en espera de más recortes), además el del Verde Ecologista -que insiste en portar la bandera guinda- tendrá que realizar gestiones paralelas a las que realice David Monreal, tal como lo presumió en la campaña, pues sabe que las participaciones federales se mantendrán a la baja y, excepto Saúl con ayuda de Ricardo, es casi imposible encontrar recursos extraordinarios en la 4T.

Poco le ayudará la sombra de un candidato electo que hasta el momento no ha logrado ningún presupuesto especial para Zacatecas en el Crédito Ganadero, ni en el IMSS, ni en la federalización de la nómina magisterial, ni en la UAZ. Compromisos que él mismo se echó al bolsillo y que nunca cumplió. Por el contrario, le redujeron y luego le desaparecieron sus recursos en 2019 y 2020.

Por eso es tan importante continuar la polarización de los procesos de entrega-recepción estatal y municipales. Hay muy pocas condiciones para que David cumpla las promesas de un gabinete plural, de un gobierno amigo de Palacio Nacional, de carreteras estatales que en 100 días envidien los países del primer mundo, y de gobernabilidad financiera. Le sobrará, en cambio, mucho discurso.


#Casualidades: Lo que indujeron Julio César Chávez Padilla y Arturo López Bazán en la reunión con presidentes municipales de distintas extracciones partidistas, es una franca provocación y el anuncio de cómo se politizará en un tema tan sensible como el de seguridad pública.

La propuesta que les envía David Monreal de manera informal y a través de emisarios, es que permitan que el titular de la SSPZ designe a los titulares de seguridad municipal. Sin un convenio de por medio, el ofrecimiento quedó en el aire y luego tendrá otro objetivo.

La trampa es muy sencilla: si la violencia recrudece en algunas demarcaciones será culpa de las autoridades que no recibieron con los brazos abiertos la propuesta de David, obviando cualquier garantía a cambio. El sermón de López Bazán incluso frisó en amenaza, refieren algunos.

Que debían pensar en el bienestar de sus familias y de sus gobernados, como principal motivo para que funcione el estilo de imposición que pretende Monreal Ávila, se escuchó la sentencia.

En cuanto a la propuesta para designar a sus titulares de Desarrollo Social, el escenario es aún más mezquino. Si quieren tener un buen trato con el gobernador, dijeron, deberían de dar muestras de voluntad para trabajar de manera conjunta y permitir que la delegada Verónica del Carmen Díaz Robles tome las riendas de los programas sociales en los tres niveles.

El problema es que en la coalición Va Por Zacatecas aún no se distinguen liderazgos que permitan avanzar en, al menos, una conferencia de prensa de las autoridades electas en la que manifiesten una postura de bloque y se socialice pluralmente esta problemática.

Twitter: @GabrielConV

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *